lunes, agosto 08, 2005

Sin mi no existes

Me transformo, me convierto a tu volundad, maldita fórmula la de darme significado a partir de tu vida, a partir de tus conocimientos, a partir de tu voluntad.
Donde me vuelvo sombra, me vuelvo luz, puedo ser opaca o brillante, puedo ser una metáfora o una analogía, viajo por los cuerpos, los toco, los siento. Penetro los pensamientos, estoy en todas partes, en tu mente, en tu tinta, en tu forma de ser, me convierto en lo que quieras, me vuelvo tan volátil como un explosivo, como una sustancia que se adhiere a todo, puedo ser complicada o sencilla, puedo dar poder o quitarlo, junto a mi todo existe, soy música, soy elemento, soy vida y muerte de toda existencia. Soy Dios, Demonio, Angel o Virgen... soy real, soy inexistente, soy un fantasma, vivo en tu aliento, en tu escritura, en tu vida y en la de los demás.
Soy un simple símbolo, un significado compartido, un ente formado de la convención de unos cuantos que le dijero a muchos que era yo. Soy la estúpida palabra. Llámenme, Palabra.

1 comentario:

Abe dijo...

la palabra no es la palabra...